Nota técnica sobre la Presencia de Lepismas en Museos con Colecciones de Papel.
Introducción
Los lepismas, conocidos comúnmente como "pececito de plata", son insectos del orden Zygentoma que constituyen una amenaza significativa para colecciones de papel, libros, y manuscritos en museos y archivos. Este informe técnico aborda la presencia de diferentes especies de lepismas en España, y propone estrategias para la prevención, control y mitigación de sus efectos sobre las colecciones museísticas.
Descripción de los lepismas
- Tamaño y apariencia: Los lepismas son insectos pequeños, de 10 a 15 mm de longitud, con cuerpos aplanados cubiertos de escamas plateadas o grisáceas. Se caracterizan por largas antenas y tres apéndices caudales en la parte posterior del cuerpo.
- Ciclo de vida: Su ciclo de vida incluye una fase de huevo, ninfa y adulto. Pueden vivir entre 2 y varios años, dependiendo de las condiciones ambientales, y son más activos durante la noche. Resumen del Ciclo de Vida
· Huevo: 2 semanas a varios meses, dependiendo de las condiciones ambientales.
· Ninfa: De varios meses a 3 años, con múltiples mudas.
· Adulto: Vida adulta de 2 a varios años, con capacidad de reproducirse y continuar mudando.
- Hábitos alimenticios: Se alimentan de materiales que contienen almidón y azúcares, como el papel, pegamentos, encuadernaciones y restos orgánicos.
Especies de lepismas en España
En España se han identificado varias especies de lepismas que pueden dañar colecciones en museos y archivos. Entre las más relevantes se encuentran:
Lepisma saccharina (pez plateado): Es la especie más común en interiores, ampliamente distribuida en toda España. Prefiere lugares húmedos y oscuros, como sótanos y almacenes.
Thermobia domestica (lepisma de fuego): Esta especie prefiere ambientes cálidos y secos, como cocinas y sistemas de calefacción. Aunque menos común, puede ser igualmente destructiva para el papel.
Ctenolepisma longicaudata (pez plateado de cola larga): Esta especie ha incrementado su presencia en varias regiones de España, incluyendo Madrid y Cataluña. Se distingue por su preferencia por ambientes menos húmedos y su tamaño ligeramente mayor.
Ctenolepisma lineatum (lepisma rayado): Menos común, se identifica por las rayas oscuras a lo largo de su cuerpo plateado. Se ha encontrado en algunos museos y archivos en España.
Lepisma calvum: Esta especie, menos conocida, ha sido reportada en algunos museos y archivos en Europa, incluyendo España. El *Lepisma calvum* se distingue por su cuerpo sin escamas plateadas y su apariencia más lisa en comparación con otras especies. Aunque es menos frecuente, su presencia debe ser monitoreada, ya que también se alimenta de papel y otros materiales ricos en almidón. Recientemente la hemos localizado en museos de Cataluña donde está siendo monitorizada y tratada.
Impacto en las colecciones de papel
- Papel: Los lepismas roen la superficie del papel, dejando rastros visibles de erosión que pueden destruir textos e imágenes. Además, atacan el pegamento de las encuadernaciones, debilitando la estructura de libros y cómics.
- Tintas y pigmentos: Aunque los lepismas prefieren el papel, pueden dañar tintas y otros pigmentos, comprometiendo la integridad visual de cómics y otros materiales gráficos.
Vulnerabilidad de los cómics
Los cómics son particularmente vulnerables debido a la diversidad de materiales utilizados en su producción. Las ediciones antiguas, que emplean procesos de impresión y encuadernación más frágiles, son especialmente susceptibles a daños irreparables por parte de los lepismas.
Prevención y control de lepismas en museos
- Control ambiental: Es fundamental mantener un control riguroso sobre la temperatura y la humedad relativa en las áreas de almacenamiento. La humedad debe mantenerse por debajo del 50%, y se debe garantizar una buena ventilación para evitar la proliferación de lepismas.
- Limpieza y mantenimiento: La limpieza regular de los espacios de almacenamiento, eliminando polvo, restos de papel y fuentes de alimento, es esencial para prevenir infestaciones.
Monitoreo
- Trampas adhesivas: Utilizar trampas adhesivas con atrayentes para lepismas puede ayudar a monitorear y detectar su presencia antes de que causen daños significativos. Muy importante que estas sean específicas para el lepisma. Se recomienda un control mensual.
- Inspecciones regulares: Realizar inspecciones visuales periódicas en áreas de almacenamiento de alto riesgo es clave para detectar la presencia de lepismas. Es también de suma importancia la revisión de entrada de obras procedentes de préstamos o donaciones por parte del departamento de conservación preventiva. Y disponer de una trazabilidad de las obras.
Métodos de control
- Anoxia: La anoxia, o tratamiento con atmósfera libre de oxígeno, es una técnica de desinfestación utilizada para eliminar plagas como los lepismas en colecciones de papel, libros, fotografías sin causar daños a los materiales. Este proceso, ampliamente utilizado en la conservación preventiva, es seguro para los objetos sensibles y permite eliminar plagas sin el uso de productos químicos agresivos
- Congelación controlada: La congelación de documentos y materiales infestados es un método efectivo para eliminar insectos sin causar daños al papel. Esta técnica es segura y ampliamente utilizada en la conservación de documentos. Debe de consultarse siempre por el departamento de conservación preventiva y determinar si la obra es viable pasar por una baja temperatura.
- Uso de insecticidas: El uso de insecticidas debe ser un último recurso, en caso de alta incidencia en el monitoreo y el protocolo del nivel de tolerancia que se determine, se coloca un punteo de gel muy dirigido a las zonas de mayor afectación. Este sistema está funcionando muy bien y reduce en poco tiempo la densidad. (no se aplica en las obras).
- Barreras físicas: El uso de vitrinas herméticas, cuadros u objetos colgantes separados de la pared con protección del cáncamo de agarre y materiales de conservación libres de ácidos puede ayudar a proteger las colecciones de los lepismas.
Conclusiones y recomendaciones
Los lepismas, representan una amenaza significativa para las colecciones de papel y cómics en museos y archivos en España. Es fundamental implementar estrategias de conservación preventiva que incluyan el control ambiental, la limpieza regular, el monitoreo y el uso de técnicas de conservación adecuadas para minimizar el riesgo de daños.
Es importante disponer de un protocolo de control y conocimientos necesarios para determinar los niveles de tolerancia permitidos y conocer la normativa actual vigente sobre el uso de biocidas.
Recomendaciones:
1. Mantener un control ambiental estricto, con especial atención a la humedad y la temperatura en las áreas de almacenamiento.
2. Realizar limpiezas periódicas para eliminar fuentes de alimento para los lepismas.
3. Monitorear regularmente mediante trampas adhesivas y realizar inspecciones visuales en áreas de alto riesgo.
4. Utilizar técnicas de conservación adecuadas, como la congelación controlada o anoxia y barreras físicas, para proteger los documentos y cómics valiosos.
Bibliografía
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- Selwitz, C., & Maekawa, S. (1998). *Insect Control: Freeze, Heat, and Irradiate?*. Getty Conservation Institute.
- Zahradník, J. (2001). *Guía de los Insectos de Europa*. Omega.
- Querner, P. (2020). *Management of Pest Insects in Museums, Archives and Historic Houses in Central Europe*. Springer.
RIESGO DE CONTAGIO POR PRESTAMOS ENTRE MUSEOS
Los préstamos de obras de arte, documentos, libros y otros objetos de valor entre museos son una práctica común para exposiciones y colaboraciones. Sin embargo, este intercambio también puede conllevar riesgos, como la transferencia accidental de plagas, incluyendo los lepismas u otro tipo de artrópodos. A continuación, indicamos cómo se produce el contagio de lepismas a través de los préstamos de obras, y consejos para minimizar este riesgo.
Mecanismos de contagio
Los lepismas pueden infestar obras de papel, libros, manuscritos, textiles y otros objetos orgánicos. Cuando una obra infestada se traslada de un museo a otro, existen varias formas en las que los insectos pueden propagarse:
Infestación directa del Objeto: Si un objeto prestado (como un libro o una pintura) ya está infestado con lepismas, estos pueden trasladarse al nuevo entorno del museo receptor. Los insectos pueden estar presentes tanto en el objeto en sí como en su embalaje.
Contaminación del embalaje: Los lepismas pueden esconderse en los materiales de embalaje utilizados para transportar las obras. Si el embalaje no es inspeccionado adecuadamente, los insectos pueden escaparse al desembalar la obra en el museo receptor, extendiéndose a otras áreas.
Introducción a los almacenes o zonas de exposición: Una vez que una obra infestada llega al museo receptor, los lepismas pueden propagarse a las áreas de almacenamiento o exposición. Debido a su pequeño tamaño y comportamiento nocturno, su detección puede ser difícil hasta que la infestación se haya extendido.
Factores que incrementan el riesgo
Clima y condiciones ambientales: Los museos ubicados en zonas de clima húmedo o con control ambiental deficiente corren un mayor riesgo de infestaciones, ya que los lepismas prosperan en ambientes húmedos y oscuros.
Inspección inadecuada: La falta de protocolos estrictos de inspección de obras prestadas o recibidas puede permitir que las infestaciones pasen desapercibidas.
Frecuencia de préstamos: Cuanto mayor sea la frecuencia de préstamos de obras, mayor será la posibilidad de transferir plagas entre instituciones, especialmente si no se siguen procedimientos preventivos adecuados.
Medidas preventivas para evitar el contagio de lepismas entre museos
Inspección Visual Minuciosa: Antes de que una obra se envíe como préstamo, debe someterse a una inspección visual detallada para detectar signos de infestación por lepismas. Esto incluye examinar áreas ocultas, como el reverso de cuadros, las encuadernaciones de libros y los márgenes de documentos.
Tratamiento Preventivo: Si se detectan signos de plagas, el objeto debe ser sometido a tratamientos de desinsectación antes del envío.
Embalaje y transporte
Materiales de Embalaje Libre de Plagas: Es crucial utilizar materiales de embalaje nuevos y libres de plagas. Las cajas, papeles, plásticos y otros materiales deben almacenarse en condiciones controladas para evitar infestaciones antes de su uso.
Sellado Hermético: El embalaje debe ser sellado de manera hermética para evitar que los insectos puedan entrar o escapar durante el transporte, la infestación puede producirse en los elementos de transporte, camiones, aviones, etc.
Protocolos de recepción en el museo receptor
Cuarentena Preventiva: Al recibir obras prestadas, estas deben ser puestas en cuarentena durante un período de tiempo antes de ser integradas en las colecciones permanentes o ser exhibidas. Esto permite detectar cualquier signo de plaga que haya pasado desapercibido durante la inspección inicial.
Monitoreo de Plagas: Las áreas de cuarentena deben estar equipadas con trampas adhesivas y otros dispositivos de monitoreo para detectar la posible presencia de lepismas y otras plagas y no deben de mezclarse junto a otras obras de cuarentena.
Inspección del Embalaje: Al abrir los embalajes, se debe realizar una inspección cuidadosa de los materiales de embalaje para detectar signos de infestación. El embalaje utilizado debe ser eliminado de manera segura para evitar la propagación de plagas en las instalaciones.
Colaboración entre museos
Comunicación y Transparencia: Es fundamental que los museos compartan información sobre las condiciones de conservación y el historial de plagas de las obras prestadas. Esto puede incluir informes sobre inspecciones previas, tratamientos realizados y cualquier incidente relacionado con infestaciones anteriores.
Establecimiento de Protocolos Comunes: Las instituciones que realizan intercambios frecuentes deben trabajar juntas para desarrollar protocolos estándar para la inspección, el embalaje y la cuarentena de las obras prestadas. Esto incluye el desarrollo de acuerdos formales sobre las medidas de control de plagas que se deben implementar antes y después del préstamo.
El préstamo de obras entre museos conlleva un riesgo de transferencia de plagas, lo que puede comprometer la integridad de las colecciones. Sin embargo, este riesgo puede minimizarse a través de la implementación de protocolos preventivos.
